martes, 16 de mayo de 2017

Murió Eddy Rapoport, el organizador de las malezas comestibles

A los 90 años falleció el barilochense que se destacó con sus estudios en biología y ecología. 

Meses atrás había sido distinguido por el Senado.



La comunidad científica de Bariloche está de luto. La muerte de  uno de sus más brillantes científicos: Eduardo “Eddy” Rapoport, el biólogo, ecólogo y escultor a los 89 años genera conmoción.

Rapoport fue doctor en Biología, se radicó en Bariloche y fundó el Laboratorio Ecotono, en la Universidad Nacional del Comahue. Ecólogo prestigioso, pionero en el estudio de las malezas comestibles, descubrió gran cantidad de especies vegetales e incluso cuenta con leyes de la biología que llevan su apellido e hizo significativos aportes en el estudio de los suelos.

En marzo había recibido la mención de honor del Senado de la Nación, Domingo Faustino Sarmiento, por su obra destinada a “mejorar la calidad de vida de sus semejantes, las instituciones y las comunidades”.

“Es un reconocimiento demasiado ostentoso y agradezco que me lo hayan enviado ya que tengo problemas para trasladarme. ¿Cuál fue mi mayor logro? Poder explicar lo inexplicable”, dijo Rapoport, en su último diálogo con DeBariloche.

Recordó también sus años en Venezuela: “Al igual que muchos profesionales, tuve que radicarme en el exterior. Tenía una invitación de la Universidad de California pero recibí un telegrama desde Venezuela en el que tuteándome, me decían: ‘Sabemos que te vas a Estados Unidos pero más útil sería que te quedaras en Latinoamérica´. Cinco años estuve allá. En 1971, la Fundación Bariloche me ofreció venir a Bariloche y cuando consulté a mi familia, gritaron: ¡ya!”.

Eddy Rapoport, además de tener un reconocimiento profesional a nivel internacional por los aportes que ha realizado a la etnobotánica y a la biodiversidad de la Patagonia, realiza en paralelo obras plásticas con materiales naturales. 

Solía decir que el arte y la ecología siempre estuvieron unidos a su vida. Comenzó a realizar obras en la década del 60 en la ciudad de Caracas, en Venezuela. Luego continúo en Bariloche hasta que en los 70 la Junta Militar lo expulsó junto a otros investigadores de la Fundación Bariloche y se fue a México hasta el regreso de la democracia.

A fines del años 2007, el Concejo Municipal lo homenajeó con la entrega del Premio al Mérito por la creación del laboratorio de etnobotánica Ecotono que funciona en Bariloche desde 1989.

En 1984, de regreso de su exilio en México, se instaló en un pequeño y precario lugar dentro del Centro Regional Universitario Bariloche de la Universidad Nacional del Comahue. En aquella época sus primeros becarios trabajan separados, muchas veces en sitios distantes y en sus propios hogares. Incluso el propio Eddy Rapoport, por falta de espacio, tenía las habitaciones de su casa invadidas por una impresionante biblioteca.

Finalmente, en el año 1989, lograron formar el actual Laboratorio Ecotono que continúa realizando aportes fundamentales para la protección y la conservación de la biodiversidad del ambiente patagónico, su ecología y sus ecosistemas naturales. 

Ha publicado más de 100 trabajos de investigación e igual número de artículos de divulgación y 5 libros (estos últimos en el CNRS de París, en México, Oxford y UNESCO) en temas de biología teórica, hidrobiología, edafología, entomología, biogeografía, ecología de las invasiones y de disturbios (cambio global), ecología urbana y plantas silvestres comestibles. 

Perteneció al Comité Editorial de distintas revistas especializadas de Latinoamérica y Europa.

Ha sido Presidente de la Asociación Argentina de Ecología entre 1995 y 1997.

Ha dirigido un total de 70 becarios, investigadores, tesis de licenciatura y doctorales en varias universidades de Argentina, Chile, México y Venezuela.

Ha participado activamente en 58 simposios, ferias de trabajo, congresos nacionales e internacionales.
Su experiencia en Evaluación del Impacto Ambiental incluye unos 30 trabajos para distintos emprendimientos.

Ha dado numerosas conferencias en el país y en el extranjero, entre ellas en la Universidad de Cornell (Nueva York), Universidad Católica de Louvain (Bélgica), Universidad de Londres, Imperial College, Universidad de California (Berkeley y Los Angeles), Royal Society (Londres), Universidad de Stanford, Universidad de Barcelona, Universidad de Extremadura, etc.

Entre otras distinciones en 1986, fue distinguido como Honorary Member, Ecological Society of America; en 1990; Annual Award in Biological Sciences, Third World Academy of Sciences, Trieste, Italia y en 1991 fue nombrado ciudadano Ilustre por el Concejo Municipal de la Ciudad de Bariloche.

Catorce especies de Himenópteros, Paurópodos, Colémbolos, Crustáceos Copépodos, Acaros, Coleópteros y Proturos han sido nominados “rapoporti” por varios autores. Tres géneros han sido nominados de igual manera.

Condolencias

Centro Regional Universitario Bariloche

Ayer 15 mayo a los 89 años falleció el biólogo Eduardo Rapoport, prestigioso ecologista, fundador del Laboratorio Ecotono y profesor de la Universidad Nacional del Comahue Bariloche.
Pionero en el descubrimiento de gran cantidad de especies vegetales, propugnó la necesidad de un cambio en la dieta de la humanidad para aprovechar la riqueza de las malezas comestibles, las “bienesas” como decía él. A su vez realizó significativos aportes en el estudio de los suelos.
Desde la UNCo Bariloche acompañamos a su familia y amigos, en particular a todos los docentes, investigadores y becarios que compartieron momentos con él.

Municipalidad Bariloche

El intendente Gustavo Gennuso y todo su equipo de gobierno, en representación del municipio de San Carlos de Bariloche, lamenta el fallecimiento del reconocido vecino Eduardo Rapoport, y acompaña a la familia en tan doloroso momento.
Rapoport fue un prestigioso biólogo y ecologista, fundador del Laboratorio Ecotono y profesor de la Universidad Nacional del Comahue Bariloche. Supo dar a conocer a la comunidad local y al mundo la riqueza de especies vegetales existentes en la Patagonia, y la necesidad de incorporarlas en la mesa de todos los días.

Parques Nacionales

La Intendencia del Parque Nacional Nahuel Huapi lamenta profundamente el fallecimiento de Eddy Rapoport, a los 89 años de edad, ecólogo, naturalista, biogeógrafo, escultor, amante de la naturaleza y apasionado por las malezas comestibles. Fue un científico, un inventor y un artista.
Eddy colaboró con el Parque Nacional Nahuel Huapi en forma permanente aportando  saberes y conocimientos que enriquecieron la educación ambiental y la conservación. Por ello en reconocimiento a su labor, en el año 2008 se inauguró en la placita de la oficina de Educación Ambiental en Gallardo y Beschtedt, el “Jardín de Nativas Eddy Rapoport”.
Con un gran sentido del humor nos deja muchas enseñanzas y un gran legado para el presente y el futuro.
Acompañamos a familiares y amigos en tan doloroso momento.

Fundación Bariloche

Las autoridades y el personal de Fundación Bariloche hacen suyo el dolor
por la partida de quien fuera Director del Departamento de Ecogeografía de
Fundación Bariloche y un amigo.
Fue un sabio, un ejemplo de sabiduría, bondad y generosidad.
Su recuerdo estará siempre vivo en todos.
Es una gran pérdida para la comunidad de Bariloche y para la humanidad.

 Asueto

Por Resolución CRUB GBA Nº 1967/17 se dictó el asueto académico y administrativo para toda la jornada de mañana miércoles 17 de mayo. A su vez, como lo indica el protocolo en estos casos, se ha dispuesto izar la bandera a media asta durante tres días.Mañana a las 11 horas los restos de Eduardo Rapoport serán depositados en el Cementerio del Montañés. Se invita a toda la comunidad que así lo desee, a participar de esta ceremonia.

sábado, 13 de mayo de 2017

Quien construyó el Bunker de Villa Tacul?

Un extraño bunker destruído en Bariloche



A orillas del Lago Nahuel Huapi, en una zona conocida como Villa Tacul (muy cerca del famoso Hotel Llao-Llao) a una veintena de kilómetros de la ciudad rionegrina de Bariloche, se las puede ver:  las ruinas de una misteriosa construcción ya demolida hace mucho tiempo.

Se llega al lugar no con poco esfuerzo de parte de quien quiera acercarse a conocer esta curiosa edificación dinamitada (curiosamente) por el Ejército Argentino allá lejos y hace tiempo. Vaya uno a saber el por qué de tanto empeño en destruir aquel edificio al que no pocos lugareños solían llamar "bunker"...



Ubicado en un alto promontorio, desde el lugar se divisa gran parte del lago y se puede ver la famosa Isla Victoria. ¿Un puesto de vigilancia? ¿Un refugio seguro? ¿Vigilar a quién? ¿Proteger a quién? La leyenda dice que muchos habitantes de las zonas aledañas asociaban directamente al "bunker" (al que en realidad podríamos llamar "refugio") con las oscuras y variadas actividades de los "alemanes" que supieron darle forma a Bariloche y sus alrededores desde los primeros años del Siglo XX y fundamentalmente los años '40.




Si bien el edificio ha sido prácticamente destruido por el Ejército, eso no impide observar algo de sus muy gruesos muros de hormigón y las bases de unas imponentes columnas que sin duda habrían hecho de este misterioso lugar un sitio muy seguro, de hecho es muy complicado poder acceder al lugar y no se lo puede observar a simple vista y con facilidad dadas las características del lugar y la espesura de la vegetación que lo circunda.




Pero si el "bunker" llama la atención por su emplazamiento y su ubicación casi "estratégica", no deja de llamar la atención (también) que el mismo nunca haya sido debidamente registrado en el Catastro Municipal de Bariloche. O sea: este edificio... nunca existió o simplemente alguien se encargó de que pase lo más desapercibido posible (cosa que se ha logrado de manera efectiva). No se conocen datos sobre su construcción, planos  de la obra, propietarios originales y quienes se han encargado de construirlo y sus motivos, pero lo concreto y nada fantasioso es que muy seguramente haya formado parte de la muy vasta red de diferentes refugios que los "alemanes" que coparon Bariloche y las cercanías se habían encargado de levantar como parte de sus trabajos de revelamiento de los terrenos con fines de espionaje en los días previos a la segunda guerra mundial y durante el conflicto bélico. No se descarta tampoco que el "bunker" haya sido el refugio en una zona casi inexpugnable para darle protección vaya uno a saber qué "personaje importante"...



Mientras el tiempo pasa y las conclusiones concretas no llegan, la leyenda se agiganta y las historias sobre la presencia en el lugar de un personaje llegado a estas tierras desde la lejana Berlín no dejan de circular...

Finalmente, un dato más: Ana María Dominic Tacul, lideresa de la comunidad mapuche "Tacul Chewque" que hace un tiempo logró recuperar la tierra de sus ancestros que había sido tomada por visitantes alemanes, relató que el bunker fue construido en 1946 (coincidentemente con la llegada de Juan Domingo Perón a la presidencia de la Argentina) y que el ejército argentino lo dinamitó una vez tomado el poder por la "Revolución Libertadora" en 1955. ¿Coincidencias? ¿las vueltas de la vida?... se verá.


Historias Lado B

lunes, 1 de mayo de 2017

Investigación sobre consecuencias de las cenizas que dejó erupción del Puyehue

 FACULTAD DE CIENCIAS MEDICAS DE LA UNCO




La erupción del volcán Puyehue, que se generó el 4 de junio de 2011, fue seguida de una lluvia de cenizas que, aunque no causó nuevas patologías, sí se ha demostrado que, en el caso de los asmáticos, agudizará su enfermedad.


El evento sísmico que afectó a la República de Chile y Argentina originó que la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional del Comahue realizara un trabajo de investigación que permitió conocer el impacto real en la salud de la población, buscando y comprobando con bases firmes y evidencias científicas el daño que origina la ceniza en los pulmones.
Desde que erupcionó en 2011, un grupo de neumonólogos, patólogos, bioquímicos y alumnos de la carrera estudian los síntomas respiratorios –asociados al asma–, que pueden haber sido ocasionados por la exposición a las cenizas volcánicas, sobre grupos heterogéneos de Cipolletti y Bariloche.

Los especialistas llegaron a la conclusión de “que las cenizas por sí mismas no ocasionan nuevas enfermedades, pero pueden producir o exacerbar síntomas respiratorios, como los que se vinculan al asma (tos, falta de aire, silbidos en el pecho, dolor torácico y expectoración)”.

“Por los datos obtenidos, el impacto principal de las cenizas es a nivel de los pulmones. Hay un incremento de los síntomas respiratorios que podrían vincularse con la inflamación bronquial, pero no ocasionan nuevas enfermedades crónicas”, sostuvo el docente y neumonólogo Ignacio Zabert, quien encabeza la investigación.

Según Zabert, cerca del 70 por ciento de los encuestados en Bariloche había tomado una medida -en el Valle representaron el 55 por ciento- y la mitad de la población que estudiaron, en promedio, estaba al tanto sobre cómo reaccionar ante la exposición de cenizas volcánicas.

En el laboratorio de la facultad, al comienzo, advirtieron que los roedores expuestos a las cenizas volcánicas durante un mes presentaban una inflamación a nivel de los pulmones. De esta forma, y con estos resultados, se pasó a examinar la población de Bariloche.

Los especialistas midieron la prevalencia de síntomas respiratorios relacionados con el asma en 303 niños y adolescentes, de entre 3 y 14 años; y a un año y medio, observaron que la prevalencia había duplicado su valor, de modo que un 14 por ciento de los examinados la presentaba.

“Las cenizas no causan asma, pero pueden generar síntomas o complicaciones mayores si la persona es asmática”, aclaró Zabert.

En 2015, erupcionó el Calbuco y el impacto de sus cenizas también fue considerado por la investigación en curso. Los especialistas desarrollaron un proyecto complementario que englobó dos estudios. Uno puso el foco en adultos (mayores de 18 años) de Cipolletti y Bariloche, dos poblaciones con distintos niveles de exposición a las cenizas que, sin embargo, arrojaron resultados muy similares.

A lo largo de un año, encuestaron a 2500 personas para medir la percepción que tenían del riesgo de salud de sus pulmones y evaluar síntomas de asma. De nuevo, los investigadores encontraron una alta prevalencia de síntomas respiratorios asociados a esa patología.

“La prevalencia de síntomas respiratorios durante la exposición de las cenizas fue del 30 por ciento en la población encuestada, posiblemente como sesgo del evento. Y, a medida que pasó el tiempo, fueron disminuyendo. Eso significa que podría estar influenciando la exposición aguda a cenizas”, comentó Zabert.

“El impacto principal de las cenizas es a nivel de los pulmones. Hay un incremento de los síntomas respiratorios, pero no ocasiona nuevas enfermedades crónicas”, asegura Ignacio Zabert, médico neumonólogo y docente de la UNCo.

En plena investigación, la zona volvió a quedar cubierta por cenizas volcánicas, por lo que los docentes de la UNCo hicieron encuestas durante un año para determinar su impacto. (Fuente: prensa Universidad Nacional del Comahue).

Mayor impacto según la edad y otros factores de riesgo

La edad es un factor asociado a mayores síntomas respiratorios, de manera que cuanto más grande es la persona, mayor es la probabilidad de presentarlos.

En sentido inverso, ocurre con la escolaridad. A medida que disminuye, los síntomas aumentan, tal vez porque dicho factor se vincula con otras variables socioeconómicas influyentes. Por último, los especialistas consideran el tabaquismo como un agente que acrecienta la posibilidad de sufrir mayores síntomas, aunque no necesariamente todos los fumadores sufren las mismas consecuencias.

Esas conclusiones forman parte del estudio que la Universidad Nacional del Comahue presentó el pasado miércoles 26 de abril y que conforma una primera etapa de siguientes investigaciones, por ejemplo, una que busca determinar el impacto de las cenizas en una porción de la población infantil. Ese estudio complementario está pendiente y se llevó a cabo tanto en Bariloche -la ciudad más afectada de la provincia- como en Cipolletti, con encuestas en escuelas a 600 chicos, donde los profesionales evaluaron síntomas respiratorios (asociados al asma).